Tipografía para niños
por Ilene Strizver
La mayoría de los niños aprenden a leer letra por letra, aprendiendo qué sonidos van con qué formas hasta que pueden mezclar los sonidos para formar palabras. Por eso los nuevos lectores avanzan despacio y a veces tienen dificultades con la pronunciación y el acento silábico.
Los esfuerzos de los nuevos lectores pueden apoyarse asegurándose de que sus textos utilizan tipos de letra atractivos y fáciles de leer, colocados de la forma más legible.

Legibilidad del texto
Al seleccionar un tipo de letra para un texto infantil, busque un diseño cálido y amable, con formas de letras sencillas y generosas. Los contadores (las formas encerradas dentro de los caracteres) deben ser redondeados y abiertos, no angulosos ni rectangulares. Evite las formas de letra no tradicionales. Un buen ejemplo de un tipo de letra con estos atributos es Sassoon Primary, diseñado específicamente para niños.
Los tipos de letra con alturas x más grandes suelen ser más fáciles de leer que los que tienen alturas x más cortas, y esto es especialmente cierto para los niños. Para lectores muy jóvenes, seleccione diseños con "a" y "g" de un solo piso (también llamados caracteres infantiles), ya que son las minúsculas con las que los niños en edad preescolar y escolar aprenden a escribir. Deje las versiones de dos pisos para los lectores más experimentados.
Pueden utilizarse diseños sans o serif, siempre que eviten cualquier extremo que pueda perjudicar la legibilidad. Por ejemplo:
- No utilice tipos de letra condensados o expandidos, que dificultan el reconocimiento de los caracteres.
- Elija un peso medio o de libro; evite los pesos muy gruesos o en negrita.
- Si va a utilizar cursiva, asegúrese de que también sea fácil de leer y de que no esté demasiado condensada o estilizada.
Tanto el Bembo Infant con gracias como el Plantin Infant, así como el Gill Infant, un estilo sin gracias, se han diseñado para los niños y ejemplifican los principios anteriores.
Hacer el texto legible
Los nuevos lectores tienen que aprender a seguir las palabras de izquierda a derecha y a "saltar" con los ojos del final de una línea al principio de la siguiente. Para facilitar esta tarea, ponga el texto en grande (de 14 a 24 puntos, según el tipo de letra y la edad del lector) y con un interlineado muy generoso (de 4 a 6 puntos).
Las líneas deben ser cortas y no debe haber demasiado texto por página. Los bloques densos pueden intimidar a los lectores jóvenes. Evite todas las mayúsculas, que resultan difíciles para lectores de cualquier edad.
Asegúrese de que exista un amplio contraste entre el tipo de letra y el fondo. Esto es especialmente cierto cuando se colocan tipos claros sobre un fondo oscuro, como es habitual en los libros infantiles con muchas ilustraciones. Cuando haya más de un párrafo en una página, utilice espacios entre líneas en lugar de sangrías para separar los párrafos. De este modo, el texto y el lector tienen una pausa visual.
Encabezados y títulos
Los titulares o títulos permiten jugar con el estilo, el color y el diseño, ya que hay menos palabras que leer. Estilos decorados, mucho color y líneas de base curvas o con saltos pueden servir para atraer y entretener al joven lector. La clave para mantener el interés de los jóvenes lectores y hacer que pasen las páginas es la ligereza y la diversión.

- Nota del editor:Ilene Strizver, fundadora de The Type Studio, es consultora tipográfica, diseñadora y escritora especializada en todos los aspectos de la comunicación tipográfica. Dirige talleres internacionales de tipografía Gourmet. ¡Lea más sobre tipografía en su último trabajo literario, Type Rules! The designer's guide to professional typography, 4ª edición, publicado por Wiley & Sons, Inc. Este artículo ha sido encargado y aprobado por Monotype Imaging Inc.